PDI cumplimentó el mandato judicial en colaboración con Policía Federal.
Agentes de la Policía de Investigación (PDI), en coordinación con elementos de la Policía Federal, cumplimentaron una orden de cateo en un bar de la colonia La Fama, en la delegación Tlalpan, donde fueron rescatadas siete mujeres, presuntamente víctimas de explotación sexual, y se detuvo a cuatro personas, entre ellas una mujer, como probables participantes en estos hechos delictivos.
La implicada fue ingresada al Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla y los hombres al Reclusorio Preventivo Varonil Norte, a efecto de que el Juez de Control los vincule a proceso en la audiencia inicial que tendrá lugar en las próximas horas; en tanto, esta Procuraduría continuará reuniendo datos de prueba necesarios para comprobar su participación.
De acuerdo con testimonios integrados a la carpeta de investigación del caso, la imputada fungía como cajera en el establecimiento, cobrando las tarifas establecidas por los servicios solicitados y los tres sujetos eran encargados del lugar.
La mecánica en el bar consistía en que las mujeres eran empleadas con un horario de lunes a sábado, de 19:00 a las 02:00 de la madrugada, para continuar hasta las 04:00 a puerta cerrada.
Durante esas jornadas debían permitir tocamientos de índole sexual y prestarse a tener relaciones sexuales con los clientes que pagaran las sumas establecidas.
Con base en la investigación, las víctimas fueron contratadas en marzo de este año y trabajaron hasta que, mediante una denuncia anónima, agentes de la PDI de la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Trata de Personas, iniciaron las indagatorias que permitieron suponer que las mujeres que trabajaban ahí eran víctimas de explotación sexual.
Así, el 12 de octubre se solicitó a un Juez de Control una orden de cateo, misma que fue cumplimentada al día siguiente, con apoyo de la Policía Federal.
De encontrarse penalmente responsables del delito de trata de personas en su modalidad de explotación sexual, los implicados podrían alcanzar una sentencia de hasta 30 años de cárcel.