El vocal ejecutivo de la Comisión Estatal de Aguas de Querétaro (CEA), Luis Alberto Vega Ricoy, junto con la presidenta del Consejo Consultivo del Agua, Katia Reséndiz, encabezó la presentación del informe de resultados de la primera etapa de saneamiento del Río Querétaro, acción que beneficia a más de 800 mil habitantes de la zona metropolitana.
Durante el informe señaló que tras 13 meses de haber implementado el proceso de saneamiento a lo largo de 3.7 km, se han reducido los olores desagradables, incrementó la retención de sedimentos, se redujo la demanda química de oxígeno, y se disminuyó la cantidad de patógenos y coliformes fecales, lo que genera condiciones para incrementar la biodiversidad. Todo lo anterior convierte al Río Querétaro en el primero en Latinoamérica en ser saneado con esta tecnología.
La segunda etapa se llevará a cabo a finales del mes de noviembre en el municipio de El Marqués, en la que la CEA invertirá cinco millones de pesos en un tramo de 3.5 kilómetros. Además se dará continuidad a las actividades de la primera etapa, incluyendo el mantenimiento y evaluación.
Vega Ricoy señaló que es importante mandar el mensaje a toda la nación, de que en Querétaro se trabaja en los temas hídricos, además que se da cumplimiento a una indicación del gobernador, Mauricio Kuri, para atender todo lo que implique un mejoramiento en la calidad de vida de las y los queretanos.
“Me han dicho que ya antes se decía de la limpieza y ahora les digo que sí vamos a tener éxito en esta ocasión, porque le estamos apostando fuertemente Gobierno del Estado y tenemos la colaboración de los gobiernos municipales, el gobierno federal, la sociedad y la academia”, aseguró.
Dentro de su mensaje, Katia Reséndiz Jaime dijo que Querétaro tiene una gran oportunidad de colocarse en la agenda nacional con este tipo de acciones que ponen atención al agua residual que tiene un enorme potencial para poder considerarla como un activo, apostar al saneamiento y a la economía circular del agua.
“El Río Querétaro nos une en una sola misión, devolverle su vida, protegerlo y sobre todo convertirlo en un símbolo de unión y dignidad. (…) El agua exige trabajo, investigación, participación ciudadana, unidad”, subrayó.
