El impacto de los misiles ha activado las sirenas. Fuentes policiales de Irak consultadas por Reuters han señalado que se ha tratado de tres proyectiles Katiusha que han provocado un incendio en la Zona Verde.
Al menos uno ha caído a unos 100 metros de distancia de la Embajada de Estados Unidos.
Aunque Estados Unidos mató a Abu Mahdi al-Muhandis (murió en el mismo ataque aéreo que mató al comandante Qassem Soleimaní), una de las cabezas de las milicias, otros grupos chiitas están armados hasta con tanques y son cercanos a Irán.
Trump declaró hoy que Irán “parece haber cedido” tras atacar con misiles una base en Irak usada por tropas de Estados Unidos, donde según el mandatario no hubo bajas estadounidenses o iraquíes.