PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas y amigos:
Me da mucho gusto participar en esta Convención Bancaria, que se celebra al inicio del nuevo gobierno, cuando estamos hablando de llevar a la práctica, de hacer realidad un verdadero cambio, una transformación de la vida pública de nuestro país.
Por eso me da mucho gusto estar aquí con ustedes, por la importancia que tiene este sector bancario, financiero, para el desarrollo de nuestro país. Vamos a conseguir, entre todos, con la suma de voluntades, de esfuerzos, de imaginación, de recursos, vamos, entre todas y todos, a conseguir el renacimiento de México, lo tenemos que hacer juntos, tenemos que unirnos con ese propósito.
Estamos nosotros presentando un nuevo paradigma para conseguir que las cosas mejoren realmente en el país. Es público y notorio, es sabido, que no ha habido buenos resultados con la política económica que ha venido aplicándose en los últimos tiempos, ni siquiera en términos cuantitativos.
En 36 años nuestra economía ha permanecido prácticamente estancada, un crecimiento anual en promedio del dos por ciento, si descontamos el aumento en la población, el resultado es cero crecimiento económico. Y estamos hablando de crecimiento, no de desarrollo.
Si no ha funcionado la política económica en cuanto a que haya crecimiento económico, pues ya podemos imaginar lo que ha sucedido en otros campos, en otros terrenos. Si no hay crecimiento económico no hay empleos, si no hay empleos no hay bienestar, si no hay bienestar no puede haber paz y tranquilidad.
Por eso sentimos que hace falta cambiar el modelo, pensar en una etapa que se puede denominar posneoliberalismo, inaugurar una etapa nueva y que el nuevo modelo tenga, para el caso de México, como eje principal el acabar, el desterrar de nuestro país la corrupción.
Yo sostengo que ese ha sido el principal problema de México, la corrupción política. Nada ha dañado más al país que la deshonestidad de sus gobernantes, eso es lo que ha dado al traste con todo, esa es la causa principal de la desigualdad económica y social.
Y todos lo sabemos, así lo demuestran los datos, en la reciente encuesta de Transparencia Internacional, entre 176 países, México ocupó el lugar 136 en corrupción. Por eso todos nuestros esfuerzos tienen que ir orientados a erradicar, a terminar con la corrupción.
El combate a la corrupción y el combate a la impunidad nos van a permitir el renacimiento de México. Esa es la fórmula. Agregaría otro término, otro concepto importante, la austeridad, que no haya corrupción, que no haya impunidad y que no haya lujos y derroche en el gobierno.
De esta manera vamos a ahorrar bastante, lo suficiente para no tener que aumentar impuestos en términos reales, lo suficiente para no tener que crear impuestos nuevos, lo suficiente para tener finanzas públicas sanas. Si no hay corrupción, si hay austeridad, podemos financiar el desarrollo sin endeudar al país, y este es el planteamiento que estamos haciendo y que se está llevando a la práctica.
Aquí reitero el compromiso de que el gobierno va actuar con responsabilidad, el gobierno de la República va a ser respetuoso de la autonomía del Banco de México, que vamos a mantener los equilibrios macroeconómicos. No vamos a gastar más de lo que ingrese a la hacienda pública, no vamos a endeudar al país. Vamos a actuar con mucha responsabilidad.
Queremos lograr lo que ya han hecho nuestros antepasados en el manejo de la economía, no olvidemos que, en un largo periodo de cerca de 50 años, se creció en México a tasas del seis por ciento anual y hubo un periodo conocido como desarrollo estabilizador, 12 años, en que se creció al siete por ciento sin inflación y sin devaluaciones. Ya eso se ha conseguido en otros tiempos.
¿Por qué seguir creciendo al dos y con desequilibrios macroeconómicos? Es un desafío, es un reto, lo que estamos planteando, crecer al cuatro por ciento en el sexenio en promedio, sin inflación. Y aceptamos el desafío.
Lo vamos a lograr porque se está convocando a todos los sectores de la economía, no lo podríamos hacer solos, no podría desarrollarse el país sólo con la inversión pública. Aquí Carlos Urzúa, secretario de Hacienda, acaba de dar un dato, que la inversión pública es del 2.5 por ciento del producto, muy acotada, muy limitada, muy poca la inversión pública.
Por eso se requiere de la inversión privada nacional y extranjera, y se requiere también de la participación del sector social de la economía, sector público, sector privado, sector social. Con esta convergencia, con esta mezcla de acuerdos, de voluntades, de recursos, podemos crecer y conseguir que haya bienestar para todos los mexicanos.
En lo que corresponde a la inversión pública estamos pensando en que sea básicamente capital semilla para alentar la participación de la inversión privada. Esto es lo que significan proyectos como el Tren Maya, no podríamos financiar los 120, 150 mil millones de pesos que se necesitan sólo con inversión pública.
Se requiere de la inversión privada nacional y extranjera. Lo mismo en el proyecto del Istmo, se requiere el acuerdo para la participación conjunta del sector público, sector privado y sector social. Todo esto nos va a permitir crecer.
Y estamos también ofreciendo a inversionistas del país y del extranjero, nacionales y foráneos, que va a haber un auténtico, que hay, que existe ya, un auténtico Estado de Derecho, que al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie, que se van a garantizar los acuerdos, que se van a garantizar contratos que se suscribieron en los gobiernos anteriores, aun cuando se trate de contratos inequitativos, llamados coloquialmente leoninos.
No actuaríamos de manera arbitraria. Nada por la fuerza, decía el mejor presidente que ha habido en la historia de nuestro país: nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho. Así vamos a actuar. Vamos a convencer, a persuadir a todos para poner siempre por delante el diálogo, el acuerdo. No el autoritarismo, no la imposición.
Por eso en esta Convención Bancaria quiero reafirmar algo que ya expresé, que fue un compromiso, no vamos nosotros a promover desde el Ejecutivo ninguna ley que regule, que obligue al cobro de comisiones, es decir, que fije porcentajes en el cobro de comisiones de los bancos. Un compromiso que hicimos y lo vamos a cumplir, porque los compromisos se cumplen.
Aclaro que estamos en una etapa nueva de respeto a los poderes, que ya no es el Ejecutivo el poder de los poderes, ahora hay independencia, autonomía del Poder Judicial, del Poder Legislativo, lo mismo la autonomía y la soberanía de los estados y de los municipios, se respeta, Estado de derecho.
Aclaro esto para que no se piense que hay un doble discursos, no tenemos como doctrina la hipocresía, no es que el presidente dice una cosa, pero los legisladores, por instrucciones del presidente están actuando de otra manera, cada quien es responsable de sus actos, yo fijo la postura, con claridad, del Poder Ejecutivo, que represento.
Y creo que puede atenderse la demanda de disminución de comisiones no con leyes, no, regulando.
Hoy por la mañana recordaba una frase de un liberal extraordinario, un buen presidente de México, Sebastián Lerdo de Tejada que decía respecto a la prensa, a la libertad de prensa, decía: ‘La prensa se regula con la prensa’.
Eso es lo mismo que se puede aplicar en el caso de este sector, que los bancos se regulen con los bancos, con un elemento que es clave para el buen manejo de la economía, la competencia, que antes de pensar en regular se intente mejorar las condiciones para la competencia.
Esto es como la democracia, que no haya monopolios económicos, financieros, ni monopolios de poder.
Si hay muchos bancos hay competencia y los banqueros van a tener que ofrecer mejores condiciones a los clientes, y esto va a permitir disminuir el costo o el cobro de las comisiones.
Vamos a eso, a que haya piso parejo para todos los bancos, que no haya bancos favoritos, que no se fomente el monopolio. Ya no hay partidos favoritos, no hay sindicatos favoritos, no hay bancos favoritos, hay Estado de Derecho, ahora el gobierno representa a todos los mexicanos.
De modo que de esta forma creo que van a ir mejorando las cosas y se va a dar un mejor servicio con menos costos para los usuarios de la banca, que haya más competencia. Sí se necesita, pero eso lo veríamos en el mediano plazo, otorgar más concesiones, más bancos, por qué no más bancos regionales si se requiere y si hace falta para que haya un mejor servicio y al mismo tiempo se reduzcan los costos por comisiones.
Lo otro que es importante en el corto plazo es que podamos mandar un mensaje, llegar a un acuerdo también a partir de la competencia para no cobrar tanto a los paisanos, migrantes, que envían remesas a sus familiares, que se pueda abaratar este servicio con competencia.
Yo quiero estar dentro de un año aquí, con ustedes, y quiero poder decir: ´Se hizo un esfuerzo y por la competencia ahora se cobra menos por el envío de remesas´. Estamos hablando de alrededor de 35 mil millones de dólares al año, esos ingresos son la fuente principal que tiene nuestro país y es una derrama económica con dimensión social.
A mí me gustaría venir en un año a la Convención, es más, no, con todo respeto, les tengo que pedir permiso para eso, quiero hacer un seguimiento del cobro de comisiones, nada obligatorio, nada legal.
Le pido aquí al secretario de Hacienda que tome nota y que un año pueda yo venir a decir: ´Este banco fue el que cobró las comisiones más bajas en el envío de remesas y le voy a entregar un reconocimiento en nombre del gobierno de la República´.
A competir para que se mejore el servicio. Y lo otro, es que hagamos un esfuerzo, también conjunto, para que haya servicios bancarios en todo el país, lo que ahora se llama inclusión financiera, porque no hemos avanzado mucho.
Esto que aquí se está proponiendo es por eso muy innovador, necesario, este sistema que tiene que ir acompañado de la conectividad, porque si no vamos a seguir teniendo servicios de primera sólo en las grandes ciudades, sólo donde hay acceso al internet.
Aquí Luis Niño de la Rivera, que es el presidente entrante de esta Asociación de Banqueros, dio un dato muy aleccionador sobre este asunto, de dos mil 500 municipios, sólo en dos mil hay servicio bancario, 500 no tienen servicios bancarios, estamos hablando de cabeceras municipales.
Entonces, se requiere ampliar los servicios y no quedarnos sólo en las ciudades, tenemos comunicado el país por internet, cuando mucho en un 25 por ciento del territorio, 75 por ciento no hay señal, no hay posibilidad de comunicación por Internet, hasta en las cabeceras municipales la gente tiene que irse a determinados sitios, a las lomas, para conseguir la ansiada señal.
Entonces, necesitamos por eso la conectividad, si no ¿cómo vamos a ampliar el servicio bancario? Estamos nosotros comprometidos a comunicar a todo el país por Internet, y ya se dieron a conocer las prebases para licitar 50 mil kilómetros de líneas de fibra óptica de la Comisión Federal de Electricidad, con ese propósito de poder lograr la conectividad en todo el país y lograr, entre otras cosas, la inclusión financiera.
Nosotros tenemos la determinación de distribuir los fondos, de dispersar recursos con tarjetas, ya no entregar dinero en efectivo.
Hemos decidido también que todos los apoyos para el Bienestar se entreguen de manera directa, sin intermediarios, de la Tesorería, de la Federación, al beneficiario, nada de que pase el dinero, ni siquiera por muchas oficinas gubernamentales, menos que se entregue a asociaciones para que estas asociaciones entreguen el apoyo a la gente.
Hemos encontrado que ese método no sólo no funciona, sino que es una fuente constante de corrupción. No llega el dinero, no llega completo el dinero. Por eso nos importa mucho la dispersión con tarjeta, pero necesitamos tener los medios.
También Luis hablaba de que el 60 por ciento de los adultos mayores no están incorporados al sistema bancario, el 60 por ciento de los adultos mayores del país. Nosotros, todos, desde luego ustedes, todos los mexicanos, porque el gobierno representa a todos y lo que maneja el gobierno de recursos es dinero de todos los ciudadanos.
Ahora se está llevando a cabo, se está aplicando el programa de la Pensión a Adultos Mayores de manera universal a ocho millones de adultos mayores. Pero, como aquí lo mencionó Luis, a través de las cuentas bancarias se les están haciendo llegar estas pensiones a cuatro millones de adultos mayores, cuatro millones restantes no tienen cuentas en bancos.
Tenemos que entregar el recurso en efectivo, ya no queremos eso, queremos que sea todo con tarjeta. Para eso es que nos unimos a este esfuerzo, a esta propuesta de crear este sistema de pago con tarjeta, de pago electrónico, sin manejo de efectivo.
Nosotros vamos a apoyar, en la medida de nuestras posibilidades, para que funcione este sistema y pedirles también que como Asociación de Bancos nos ayuden para que empresas con tecnología avanzada, de punta, puedan participar en las licitaciones que se están haciendo para la conectividad de todo el país por Internet.
Esto es lo que quería expresarles. Muchas gracias por la confianza que han depositado en nosotros todas y todos ustedes. Muchas gracias al ciudadano gobernador de Guerrero, Héctor Antonio Astudillo Flores, que ha sido muy respetuoso, que hemos trabajado de manera coordinada.
Muchas gracias al secretario de Hacienda, que me ayuda mucho, que es un profesional, un técnico serio, honesto, Carlos Urzúa. Muchas gracias a la maestra Adela Román Ocampo, presidenta municipal de Acapulco.
Mi reconocimiento al ingeniero Marcos Martínez Gavica, que acaba de entregar la presidencia, esta Asociación de Bancos de México. Muchas gracias, ingeniero, por su colaboración, porque durante su mandato en esta Asociación se impulsó esta iniciativa para modernizar el sistema del servicio bancario.
Me da muchísimo gusto que se haya decidido elegir a Luis Niño de Rivera, que es un hombre honesto, una gente con mucha pasión, con muchos sentimientos, que tiene las dos cosas que se requieren para estos menesteres: cabeza y corazón.
Por eso muchas gracias a Luis por su apoyo, estoy seguro que va a ser muy buen trabajo. Saludo a Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, que tenemos compromisos, tres compromisos.
El primero es que nos va a ayudar, junto con ustedes, para crecer al cuatro por ciento anual. El segundo compromiso es que vamos a sacar de la pobreza a millones de mexicanos. Y el tercer compromiso es que nos va a ayudar a limpiar de corrupción el país.
Muchas gracias, Carlos Salazar Lomelín. Muchas gracias también al ingeniero Adalberto Palma Gómez, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, que también está iniciando su función.
Y muchas gracias a todas, a todos ustedes.
Nos vamos a ver aquí dentro de un año, van a marchar mejor las cosas, vamos a poder venir a decir que ya está creciendo más la economía, que está controlada la inflación, porque le estamos haciendo caso y actuando con mucho respeto con el Banco de México.
Les vamos a poder decir que se está fortaleciendo el peso, como ha venido pasando en estos últimos días. No quiero echar las campanas al vuelo, pero nos ha ido bien en todas estas variables económicas.
Vamos a venir a decir que hay más crecimiento, más bienestar. Y algo que es muy importante, que es un reto, un desafío y algo que vamos a lograr también pronto, que haya paz, que haya tranquilidad.
Vamos a enfrentar el problema de la inseguridad y de la violencia, y de esta manera se van a crear mejores condiciones para la inversión en el país. Y voy a regresar, reitero, dentro de un año para decir: ´Este es el banco que mejor trató en comisiones a nuestros paisanos que envían remesas a sus familiares´ y aquí le vamos a dar ese reconocimiento a esa institución bancaria en nombre del gobierno de la República.
Y a ver si luego también hacemos otros reconocimientos a quienes sigan fortaleciendo el servicio bancario con dimensión social, porque tenemos que pensar en el crecimiento económico, en los negocios, en mejorar en lo personal; pero también no olvidar al prójimo, no olvidar que tenemos que actuar con dimensión cívica y con dimensión social.
De modo que muchas gracias, amigas, amigos, me toca la clausura de esta convención, y les pido a todos que se pongan de pie. Señoras, señores:
Es para mí un gusto, una gran satisfacción declarar formalmente clausurada esta Convención Bancaria, la número 82, que tuvo como tema principal: ´Una visión de futuro´, clausurar esta Convención Bancaria a las 04:35 de la tarde, del día viernes 22 de marzo de 2019.
Deseo de todo corazón que los trabajos desarrollados en esta Convención sean en beneficio de todas y de todos los banqueros, de toda la sociedad, de toda la nación, de todos los mexicanos.