Durante la administración actual Querétaro se ha colocado como ejemplo a nivel nacional por su trabajo y sus acciones en pro de la protección de la integridad y la defensa de los derechos humanos de las mujeres.
El gobierno del estado ha llevado a cabo un trabajo intenso para elaborar e institucionalizan documentos que avalan la inclusión de ese sector en todos los ámbitos del desarrollo de la entidad.
Un ejemplo es la participación de las mujeres en la obra pública en el estado, a través de la iniciativa “Mujeres en la obra”, de la Comisión Estatal de Infraestructura, a la que se sumaron la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas y el del Instituto Queretano de las Mujeres, a través de la cual se llevó a cabo ya la primera ampliación de carretera en la sierra queretana -obra en la que se invirtieron 160 millones de pesos-, en donde ellas tuvieron una participación importante.
La iniciativa establece que desde 2019 las empresas que liciten obras están obligadas a contratar al a mujeres en su plantilla laboral.
De esa forma, en colaboración con organizaciones de la sociedad civil, se concretó el “Manual de Incorporación de la perspectiva de Género en la Obra Pública”, documento que convierte a Querétaro en la primera entidad a nivel nacional y la segunda a nivel Latinoamérica en contar con un manual de obras públicas con perspectiva de género.
Con este instrumento suman ya 131 productos creados desde el inicio de la administración que buscan institucionalizar la perspectiva de género en la administración pública e iniciativa privada del estado.
El documento cuenta entre sus objetivos con el impulso de la perspectiva de género en los y las servidoras públicas como uno de los cauces generadores de cambio institucional de las dependencias y entidades de la Administración Pública Estatal.
Además sienta las bases para que las administraciones subsecuentes realicen obra pública bajo estas directrices y para que la construcción de obra pública sea pensada en la seguridad de las personas y de las ciudades.
Busca impulsar que el desarrollo urbano relacionado con obra pública tome en cuenta las necesidades de las mujeres; se trata de apuntalar la ruptura de roles y estereotipos de género que obstaculizan el desarrollo económico.
Y es que uno de los principales ejes del gobierno de Francisco Domínguez es la creación de infraestructura para el desarrollo pues en la medida en que se afecte la accesibilidad a cualquiera de los servicios se afectará directamente en la movilidad de las mujeres, su carga de trabajo y la posibilidad de participación política.
El no tomar en cuenta la perspectiva de género en la planeación, en la provisión de infraestructura, implica un alto costo en la economía nacional, estatal, regional y local.
La incorporación de la perspectiva de género en la obra pública busca contribuir a la construcción de ciudades más amables y pensadas para cerrar las brechas de desigualdad que impiden que hombres y mujeres se desarrollen plenamente a través del goce y disfrute de las ciudades.