Con el objetivo de proteger a la población de daños a la salud durante la temporada de lluvia, la Secretaría de Salud del estado de Querétaro exhorta a adoptar medidas preventivas.
En caso de mojarse la ropa con la lluvia, es importante cambiarse al llegar a casa y evitar cambios bruscos de temperatura.
Si el agua de lluvia invade tu casa, seguir las indicaciones de la autoridad correspondiente. Asegúrate que el agua que usas para beber y preparar alimentos esté desinfectada. Los alimentos deben de colocarse en lugares secos lejos de paredes y piso; evita contacto con el agua contaminada. inspecciona que frutas, verduras y cereales almacenados, no tengan hongos.
Coloca en depósitos de basura los frascos y latas de alimentos rotos o golpeados, así como alimentos que se hayan mojado con agua sucia.
Proceder a eliminar los alimentos perecederos (lácteos, cárnicos) que hayan estado sin refrigeración, debido a cortes de energía eléctrica.
Una vez que baje el nivel de agua, limpia y desinfecta paredes, pisos y otras superficies que hayan sido alcanzadas por el agua.
En caso de que tengas muebles tapizados y estos se hayan mojado, límpialos, desinféctalos, y déjalos secar al sol.
Al finalizar la limpieza, lavar bien las manos con agua potable o desinfectada y jabón; lava también, con agua caliente y detergente, la ropa contaminada con el agua de la inundación.
El estar expuestos a moho puede provocar enfermedades, por lo que, ante la presencia de irritación en ojos o en piel, congestión nasal y dificultad para respirar, se debe buscar atención médica.
Las enfermedades diarreicas y respiratorias, también son frecuentes en esta época, por lo que, al presentar fiebre, dolor de cabeza o malestar estomacal, es necesario acudir a la unidad médica más cercana.
La lluvia y el agua estancada favorecen aparición de criaderos de mosquitos, por lo que se debe intensificar medidas preventivas contra Dengue, Zika y Chikungunya: tapar, eliminar, voltear o tirar cualquier objeto o recipiente que pueda almacenar agua de lluvia eliminar la hierba alrededor de la vivienda; cambiar de forma constante el agua de los floreros; prescindir de llantas, botellas y demás utensilios que ya no uses; utilizar mosquiteros en ventanas.
Barre el patio, la azotea y la calle, una vez que termine de llover, para evitar acumulación de agua.
