Mediante los operativos realizados y las llamadas ciudadanas al 9-1-1, atendidas del 15 al 20 de febrero, la Unidad Especial Anti-COVID-19 llevó a cabo 20 suspensiones y 8 dispersiones ante el incumplimiento de medidas preventivas sanitarias que fortalecen la estrategia estatal para mitigar los efectos de la pandemia.
De junio de 2020 al 20 de febrero de 2021 suman 780 establecimientos suspendidos y 385 dispersiones de eventos por incumplir las medidas sanitarias; asimismo, van nueve mil 627 verificaciones realizadas, 16 mil 357 recomendaciones emitidas sobre los protocolos de seguridad que se deben cumplir para prevenir la enfermedad COVID-19 y 15 mil 33 visitas de fomento sanitario en las que se difunden medidas de prevención y promoción de la salud a dueños, empleados y usuarios o clientes de establecimientos, con el fin de reducir riesgos epidemiológicos.
Del 15 al 20 de febrero, en el municipio de Querétaro fueron suspendidos nueve establecimientos: una purificadora de agua, tres misceláneas, una rosticería, una tortillería, uno con venta de chorizo y chicharrón y dos bares.
En San Juan del Río se suspendieron seis establecimientos: una miscelánea, tres estéticas, una zapatería y una óptica.
En Corregidora se suspendió un establecimiento de comida china y un restaurante; en Landa de Matamoros una tienda departamental y un centro de videojuegos; en Pinal de Amoles una pastelería.
Asimismo, se llevó a cabo la dispersión de ocho fiestas y/o eventos.
En el municipio de Querétaro fueron tres dispersiones de personas en: una reunión de motociclistas y dos fiestas particulares. En San Juan del Río en: una fiesta particular, una capacitación y un parque. En Cadereyta de Montes se dispersaron a personas en una cancha de fútbol y en un bautizo.
En el mismo periodo, a través de los Auxiliares de Verificación Sanitaria se realizaron 677 visitas de fomento sanitario y se visitaron ocho establecimientos que ya se encontraban cerrados.
Las supervisiones de la Unidad Especial Anti-COVID-19 continuarán sus actividades en el estado de manera aleatoria, con el objetivo de mitigar los contagios por esta enfermedad, en establecimientos y/o en atención a las llamadas ciudadanas a través de la línea de emergencias 9-1-1, para acudir a instituciones bancarias, centros comerciales, incluso a reuniones sociales, donde no se cumplen las medidas establecidas por las autoridades sanitarias.
