El control prenatal permite detectar oportunamente complicaciones obstétricas

La Secretaría de Salud del estado de Querétaro informa por qué es importante que las embarazadas acudan a sus citas de control prenatal.

En el control prenatal se define como todas las acciones destinadas a la prevención, diagnóstico y tratamiento de los factores que pueden condicionar la morbilidad y mortalidad materna y perinatal.

Las necesidades de cada embarazada deben ser evaluadas desde la primera cita y revalorarse en cada una de las consultas que reciban, debido a que nuevas patologías pueden surgir en cualquier momento de la gestación.

Es importante que las embarazadas de bajo riesgo reciban como mínimo cinco consultas prenatales, iniciando en las primeras 8 semanas de gestación y/o después de la prueba positiva de embarazo, de acuerdo con el siguiente calendario:

1ª consulta: entre las 6 – 8 semanas
2ª consulta: entre 10 – 13.6 semanas
3ª consulta: entre 16 – 18 semanas
4ª consulta: 22 semanas
5ª consulta: 28 semanas
6ª consulta: 32 semanas
7ª consulta: 36 semanas
8ª consulta: entre 38 – 41 semanas

Los servicios que se otorgan en las consultas de atención prenatal son: valoración nutricia y bienestar emocional de la embarazada, vigilancia de la evolución del embarazo, detección oportuna de VIH/Sífilis y disminución de factores de riesgo de transmisión vertical.

El control prenatal permite detectar oportunamente complicaciones obstétricas directas e indirectas y hacer la referencia oportuna y dirigida a segundo nivel para valoración complementaria con médicos especialistas.

Busca también disminuir el riesgo de amenazas de aborto o de parto pretérmino; evitar la restricción del crecimiento intrauterino; bajo peso al nacer y prematurez; disminuir el riesgo de defectos del tubo neural, de macrosomía secundario a diabetes gestacional; disminuir la muerte fetal y de óbitos; fomentar alimentación saludable, evitando toxicomanías que afecten el desarrollo armónico del bebe.

La importancia de la atención prenatal con intervenciones integrales y preventivas, permite detectar riesgos fetales y maternos y aplicar el tamizaje prenatal oportuno entre 11 y 13.6 semanas, y el segundo trimestre de 16 a 22 semanas, donde el ultrasonido es un medio fundamental de vigilancia.

Como parte del procedimiento, para un adecuado control prenatal, se encuentran las siguientes acciones: elaboración y registro de la historia clínica y carnet perinatal de la paciente. Identificación de antecedentes heredo familiares, personales patológicos y personales no patológicos. Valoración y análisis de signos vitales maternos y fetales. Realización de estudios de laboratorio de control como Biometría Hemática completa; grupo sanguíneo y factor Rh -en Paciente Rh negativo (COOMBS indirecto)-, glucosa, creatinina; ácido úrico; examen general de orina.

Además, tamizaje, tratamiento y vigilancia de la evolución de patologías como hipertensión arterial, diabetes gestacional, sífilis, infección de vías urinarias, infección por VIH, malnutrición, carencia de vitaminas y micronutrientes: evaluación de factores de riesgo, detección y manejo de complicaciones obstétricas, prevención sistemática de enfermedades como: tétanos neonatal y materno, anemia, etc., elaboración de un plan de acción previo al parto, y prescripción de medidas generales higiénico dietéticas con el fin de promover la salud.